La estatal venezolana PDVSA está tratando de extender los contratos de tres buques tanque y contratar cinco adicionales para compensar la pérdida de envases debido a las sanciones de EE. UU., Según fuentes e informes de PDVSA, citados por Platts.

"PDVSA requiere lo antes posible tres buques para GLP, dos Aframaxes, dos Panamaxes y un buque de largo alcance [LR1]", dijo a S&P Global Platts un funcionario de PDV Marina, naviera filial de PDVSA.

Si bien PDVSA no puede trabajar con algunos armadores debido a las sanciones, "continuaremos trabajando con aquellos que se arriesgan a pesar de las sanciones de EE. UU.", agregó el funcionario.

El 28 de enero, EE. UU. dio a conocer amplias sanciones a PDVSA, imponiendo una prohibición inmediata de exportar petróleo estadounidense a Venezuela y estableciendo una prohibición de facto a las importaciones estadounidenses de crudo venezolano.

EEUU. también anunció que las transacciones entre compañías no estadounidenses y PDVSA que involucren su sistema financiero o a sus brokers de commodities estarán prohibidas después del 28 de abril.

Buques GLP

A principios de este mes, PDVSA solicitó al armador del buque “MT Queen Zenovia” que su contrato por un año. Se trata de la única nave GLP en servicio, de un total de cuatro, para cabotaje entre refinerías venezolanas y terminales marítimas para distribución en el mercado nacional, según un informe interno revisado por Platts.

El contrato por un año vence en agosto de 2019 y requiere que PDVSA solicite un año adicional con seis meses de anticipación.

El estado de los otros tres buques para transportar GLP es el siguiente, según el informe. Los armadores del “Irmgard Schulte” esperan la confirmación del seguro de protección e indemnización para continuar con PDVSA debido a las sanciones. Las naves de Navigator: “Virgo” y “Navigator Taurus” esperan la autorización de la Oficina de Control de Activos Extranjeros para llevar a cabo operaciones comerciales con PDVSA.

Buques Panamaxes

PDVSA también está buscando volver a contratar por un año adicional, bajo bandera venezolana, a los buques Panamax “Felicity” y “Ice Energy”. Ambos buques, contratados por PDVSA en 2015, se utilizaron para transportar petróleo entre el sistema de refinación de Venezuela y para el almacenamiento en el extranjero. Los contratos para los buques expiran en noviembre de 2019.

Ambas naves son administradas por Dynacom Tankers Management, de acuerdo con cFlow de Platts.

Nave LRS

PDVSA también decidió licitar en el mercado internacional la contratación de un buque tanque de Largo Alcance 1 durante un período de un año, con una opción de renovación por un año. PDVSA disponía de 11 LR1 en operación para el transporte de productos refinados, pero después de las sanciones de EE. UU., la flota perdió cinco unidades.

Según el informe, cuatro naves – “Samba”, “Balos”, “Horizon Theoni” y “St. James” - finalizaron sus contratos de manera unilateral por parte de sus armadores, mientras que el “Tajin” navegó desde territorio venezolano siguiendo las instrucciones de su armador, pero sin finalizar el contrato.

De acuerdo con los datos de cFlow, los cuatro buques estaban activos en Venezuela desde 2015, siendo el “Horizon Theoni” visto en puertos o en terminales de almacenamiento venezolanos del área, como el de Willemstad.

Aframaxes

PDVSA también está abriendo una licitación para contratar dos buques Aframax por un período de fletamiento de un año de fletamiento, con una opción de renovación por un año.

"La contratación de dos buques no será suficiente, ya que para garantizar las operaciones de suministro al sistema nacional de refinación, el suministro de combustibles para la generación de electricidad y los compromisos comerciales con clientes internacionales en las operaciones ship to ship, PDVSA requiere de 16 buques de Aframax y solo tiene operativos nueve", dice el informe.

Detención de carga y descarga

Desde el anuncio de las sanciones de EE. UU. A PDVSA, la actividad en el mercado de buques tanque “limpios” descargando o cargando en Venezuela se ha detenido, con los armadores reticentes a recalar debido a la infraestructura y preocupaciones legales.

Fuentes del sector en las Américas han dicho que los itinerarios que incluyan la descarga o la carga en Venezuela tendrán una prima si recalan en puertos del Caribe no venezolano.