Terminal Portuario Paracas S.A. (TPParacas), encargada de la modernización del Puerto San Martín de Pisco, anunció en una declaración que apelará la decisión del Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace) de no aprobar el Modificación del Estudio de Impacto Ambiental detallado (MEIA-d).

Desde TPParacas señalaron haber cumplido con todo lo dispuesto en el contrato de concesión suscrito con el Estado Peruano el 21 de julio del 2014; previa compatibilidad otorgada por el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) e indicaron que “el reciente pronunciamiento del Senace, infringe claramente la normativa al desaprobar nuestro instrumento de gestión ambiental (MEIA-d) y constituye una clara barrera burocrática”.

Indicaron además que en la determinación no priman los objetivos medioambientales que se deben lograr junto con el Concesionario, sino que se usan argumentos no ajustados a derecho y agregan que TPParacas cumplió con los Términos de Referencia aprobados y que sus actividades no generan efectos no aceptables en el medioambiente.

El concesionario añadió que “las observaciones del Senace, que sustentaron la desaprobación de la MEIA-d, han contravenido manifiestamente las normas y los Principios del Derecho Administrativo” y señala que “Existieron requerimientos no contemplados en los Términos de Referencia, generaron observaciones prefiriendo el mero formalismo al resultado, y requirieron medidas no atribuibles a TPParacas”.

US$100 millones en inversión

Desde el concesionario resaltaron que “a partir de la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental (EIA-d) nuestra empresa ha invertido más de US$100 millones de los US$300 millones del costo total. Nuestra propuesta técnica, vinculante al Contrato de Concesión, estableció desde un inicio todas las actividades económicas que el Estado requería como Concedente, las cuales fueron contempladas en nuestro modelo de negocio”.

Indicaron además que, desde el inicio de la concesión, TPParacas convocó a asesores nacionales e internacionales debidamente certificados para cumplir con los más altos estándares mundiales de calidad en ingeniería y de gestión ambiental, como los Estándares del IFC y Principios del Ecuador.

Por otro lado, recordaron que antes de recibir la concesión, el Puerto San Martín de Pisco fue operado por la Empresa Nacional de Puertos (Enapu) por más de 50 años, puerto que existe desde antes de la creación de la Reserva Nacional de Paracas, lo que, puntualizaron, “es una clara muestra de la viabilidad entre un puerto y una reserva con sus especies protegidas”.

Finalmente, TPParacas reafirmó “su compromiso de contar con los más altos estándares de manejo medioambiental para la modernización del Terminal Portuario General San Martín de Pisco”, recalcando que “ese es y será siempre nuestro camino para asegurarla preservación de nuestra Reserva Nacional de Paracas”.

Cabe recordar que a través de la resolución directoral N° 00025-2019-SENACE-PE/DEIN, Senace indicó que el titular del proyecto, Consorcio Terminal Portuario Paracas S.A. (TPP), no pudo levantar 33 observaciones de un total 277 que hicieron 12 entidades públicas que participaron como opinantes técnicos.

Entre las observaciones faltantes figuran las referidas al número de vehículos que circularán por día y medidas de mitigación, la no consideración en el estudio ambiental los criterios ambientales y sociales sobre la propuesta de ubicación del almacén de concentrado de mineral; las medidas para resguardo de fauna silvestre protegida (pelícano peruano, gaviotín peruano piquero, gecko, etc.,

Terminal Portuario de Paracas es un proyecto de puerto multipropósito orientado a manejar cargas diversas (granel seco, granel líquido y carga general) y pasajeros. Fue concesionado a favor de Consorcio Terminal Portuario Paracas S.A. (TPParacas) el 2014 por ProInversión, previa compatibilidad otorgada por el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) por constituirse un derecho preexistente. La vida útil del proyecto es de 30 años