La Asociación Americana de Autoridades Portuarias (AAPA), recomendó al gobierno de EE. UU. que cancele la decisión que eleva las tarifas arancelarias al 25% sobre aproximadamente US$$ 200.000 millones en bienes importados desde china. La AAPA también recomendó que se posponga el proceso en curso para imponer aranceles del 25% sobre los US$325.000 millones restantes en importaciones chinas.

"AAPA está muy preocupada por la decisión del presidente de aumentar los aranceles sobre los productos chinos y las represalias esperadas por parte del gobierno chino", dijo Susan Monteverde, vicepresidenta de relaciones gubernamentales de la AAPA. "Instamos al presidente a poner un alto en esta acción y continuar las negociaciones. Las tarifas perjudican a todos los estadounidenses, ya que el aumento en el costo de los bienes importados y exportados se hace sentir en toda nuestra nación", añadió.

Monteverde afirmó además que “ya sea una pequeña empresa estadounidense o un fabricante estadounidense que utiliza productos chinos, o un agricultor estadounidense que quiere exportar sus productos a China y se ven afectados por las represalias, los aranceles afectan a nuestra economía y a todos los estadounidenses”.

Y añadió que "para garantizar la prosperidad futura de EE. UU. y su condición de potencia económica, AAPA está trabajando para ayudar a la administración y a los responsables de la formulación de políticas federales a reconocer que el aumento de los aranceles comerciales sobre las exportaciones chinas hará mucho más daño que beneficio".

Cabe consignar que AAPA es miembro de Americans for Free Trade, una amplia coalición de empresas, organizaciones comerciales y trabajadores estadounidenses unidos en contra del aumento de aranceles. Los miembros de la coalición han reiterado que las tarifas son impuestos, pagados por familias, agricultores, empresas, trabajadores y comunidades estadounidenses, y no por las naciones o empresas extranjeras sobre cuyos productos se imponen las tarifas.

Los aranceles que se han aplicado hasta ahora han provocado que las empresas estadounidenses despidan trabajadores, el aumento de precios para los consumidores, la perjudicación de las exportaciones agrícolas estadounidenses y amenazas a la economía productiva.

En una carta del 22 de abril al presidente Trump, 151 de los socios de la coalición, incluida la AAPA, solicitaron:

-La eliminación total e inmediata de todos los aranceles impuestos recientemente, incluidos los aranceles estadounidenses y los aranceles de represalia de China como parte de un acuerdo final;

-Un acuerdo que nivela el campo de juego para las empresas estadounidenses mediante el logro de cambios significativos para abordar las prácticas comerciales desleales de China que ponen en riesgo la tecnología, la innovación y la propiedad intelectual estadounidense.

-Evitar cualquier mecanismo de aplicación que pudiera desencadenar nuevas tarifas;

- Una evaluación económica realizada por la Administración que examine los costos de las tarifas para las empresas y los consumidores estadounidenses.

Un estudio de febrero de 2019 preparado por Trade Partnership Worldwide, LLC y publicado por Tariffs Hurt the Heartland, muestra que un aumento en los aranceles en todas las importaciones chinas del 10 al 25% daría como resultado: más de 2.2 millones de pérdidas de empleos estadounidenses; una reducción en el PIB de los EE. UU. en más de un punto porcentual completo, y un costo para la familia promedio de cuatro integrantes, el equivalente a un cheque completo de más de US$2.300, dentro de uno a tres años luego de impuestas las tarifas.

Cabe consginar que las negociaciones comerciales entre EE. UU. cesaron sin acuerdo el viernes 10 de mayo, sin éxito y con la consiguiente aplicación de las medidas arancelarias por parte de EE. UU.