Lucas Kuehner y a Peder Winther, directores mundiales de Carga Aérea y Marítima, respectivamente, de Panalpina, abordaron el desarrollo de los mercados y el desempeño de la firma logística en lo que va de 2019, así como de las proyecciones estimadas para la temporada alta que se desarrolla en el segundo semestre del año.

Lucas Kuehner, explicó que el actual conflicto comercial entre Estados Unidos y China claramente no ha ayudado al mercado de carga aérea y destacó que tampoco se debe olvidar que los resultados de la primera mitad de este año se comparan con un primer semestre de 2018 excepcionalmente fuerte. “Una comparación con el primer semestre de 2017 da una imagen más realista”, acotó.

En ese sentido, señaló que respecto a 2017, la rentabilidad del segmento aéreo de Panalpina fue mejor y el EBIT estable. La diferencia es que en 2017 el mercado se fortaleció en cada trimestre y las tarifas aumentaron en consecuencia. En cuanto a 2019, indicó que “la disminución de los volúmenes de carga aérea se traduce en una caída de las tarifas, lo que ha ejercido presión sobre los márgenes. En el actual entorno de mercado, es difícil alcanzar el rendimiento del año pasado”.

Peder Wiinther, indicó que “el panorama no es mucho más halagüeño en el transporte marítimo. Estimamos que el mercado mundial de transporte marítimo disminuyó un 2% en el primer trimestre de 2019 y se estancó en el segundo trimestre. También en este caso, las tensiones entre Estados Unidos y China han puesto en entredicho el transporte marítimo de carga”.

Destacó sin embargo que mientras “nuestros volúmenes disminuyeron 3% en los primeros seis meses del año, mantuvimos una saludable rentabilidad unitaria. El beneficio bruto por TEU aumentó de 296 CHF [US$ 301,19] en el primer trimestre a 304 CHF [US$309,33] en el segundo trimestre. También generamos un beneficio bruto superior de 1 millón de CHF [US$1.017.520] en el segundo trimestre en comparación con el mismo periodo del año pasado.

“También hemos tenido éxito en ganar nuevos negocios y hace tan sólo unos días, nos adjudicaron los contratos de Panalpina - y posiblemente uno de los más grandes de la industria - de Carga Menor que Contenedor”, agregó.

En el ámbito aéreo, Kuehner expuso que “los dos sectores que más han sufrido son el automotor y el de la tecnología. Sin embargo, en el ámbito de la asistencia sanitaria, la tendencia es positiva. Hemos invertido en nuestras capacidades en esta área, que requiere más especialización que la mayoría de las otras industrias y esto está recién empezando a dar sus frutos”.

‘Recargo por Riesgo de Guerra’

Recientemente, Panalpina impuso un ‘Recargo de Riesgo de Guerra’ para la zona del Golfo Pérsico. Peder Winther, entregó detalles: “hay un mayor riesgo de operar en la región del Golfo. Por ahora, no hay un impacto sustancial en las rutas de carga, pero hay un costo adicional. Ahora que las navieras han añadido recargos relacionados con los seguros para dichos envíos, tenemos que hacer repercutir estos costos para seguir siendo competitivos y mantener un servicio de alta calidad para nuestros clientes. En general, existe una sensación de inseguridad en los envíos que atraviesan el Estrecho de Ormuz”.

Lucas Kuehner, detalló que “algunas compañías aéreas han desviado los vuelos en la región. Hasta ahora esto no ha tenido un impacto notable en los flujos de carga, pero las cosas podrían cambiar rápidamente, por supuesto, si la situación se agrava”.

Temporada alta

Mientras en el ámbito aéreo se espera que a partir de octubre se produzca la temporada alta habitual en el transporte aéreo de carga, “no tan fuerte como el año pasado o 2017”, según proyecta Kuehner, en el ámbito marítimo, a decir de Winther, se espera que la temporada alta bastante moderada, debido a los altos inventarios y a la incertidumbre reinante.

En ese sentido la disputa entre Estados Unidos y China, y el Brexit son factores que influyen. “Otra gran interrogante es la nueva normativa de bajo contenido de azufre que entrará en vigor el 1 de enero de 2020. Aproximadamente el 90% del comercio mundial es vía marítima y el combustible alto en azufre alimenta la flota mercante de unos 95.000 buques, incluidos los portacontenedores”, detalló Winther. 

Proyectó, en ese sentido que las navieras derivarán los costos más elevados relacionados con IMO 2020 a los dueños de la carga, proveedores logísticos de terceros y a los consumidores finales, “y ahora esperamos que esto ocurra a principios del cuarto trimestre”, adelantó.

Añadió que “esperamos que las líneas navieras gestionen la capacidad con más itinerarios en blanco” y advirtió que además de los costos más elevados “existe un potencial considerable de interrupción de la cadena de suministro debido a los retrasos en el abastecimiento de combustible, la denegación de las recaladas en los puertos, la adaptación de los buques [ mediante instalación de scrubbers] y períodos de inactividad de los buques”.