Este 11 de octubre, un buque petrolero iraní fue impactado por dos misiles en el Mar Rojo frente a las costas de Arabia Saudita.

Medios iraníes reportaron que la nave “Sabiti”, que estalló en llamas, sufrió graves daños y una filtración de petróleo luego de ser atacado esta mañana a unos 96 kilómetros del puerto de Yeda, en Arabia Saudita. Mientras que la agencia estatal de noticias IRNA dijo que la filtración ya había sido controlada. 

El incidente, que no ha sido confirmado de manera independiente aún, es el último que afecta a tanqueros en la región del Mar Rojo y del Golfo Pérsico y es probable que aumente las fricciones entre Irán y Arabia Saudita, archirrivales en la zona que están enfrentados de forma interpuesta en conflictos como Yemen, situado en el extremo sur del Mar Rojo, informó Reuters.

A través de un comunicado, la Compañía Nacional del Petróleo Iraní (NIOC, por sus siglas en inglés), armadora del buque, informó que el tanquero fue atacado con dos misiles, pero negó una información que aseguraba que procedían de Arabia Saudita. 

También el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán confirmó que el buque fue alcanzado dos veces. “Aquellos detrás del ataque son responsables de las consecuencias de esta peligrosa aventura, incluida la peligrosa contaminación ambiental causada”, aseveró el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Mousavi.

En tanto que, la Quinta Flota de la Armada estadounidense, que opera en la región, dijo que está al tanto de los reportes, pero no tiene más información.

Suben precios del petróleo

El Mar Rojo es una ruta de carga marítima clave para el petróleo y otras materias primas, al estar conectado con el océano Índico a través de Canal de Suez. Tras el hecho, los precios del petróleo se dispararon tras la noticia y fuentes de la industria dijeron que los costos del transporte marítimo ya estaban escalando. 

Sin embargo, hasta ahora nadie se adjudicó la responsabilidad por el incidente, que ocurre luego de ataques contra buques petroleros en el Golfo Pérsico durante mayo y junio, y agrava las tensiones que provocó el asalto con drones contra instalaciones de crudo de Arabia Saudita en septiembre. 

En ese contexto, Estados Unidos se ha visto inmerso en una fuerte disputa con Irán por sus planes de seguir adelante con la actividad nuclear, ha culpado a ese país por esos incidentes en el Golfo Pérsico. No obstante, la república islámica niega las acusaciones.