El director ejecutivo de Anglo-Eastern Univan Group, Bjørn Højgaard, advirtió que miles de marinos a bordo de buques, cuyos contratos ya vencieron, están cerca del punto de ruptura y podrían renunciar. Pese a que la tripulación ha respondido responsablemente a la crisis del coronavirus (Covid-19), el endurecimiento de las políticas de cambio de la tripulación está poniendo más presión en su salud mental, informó Lloyd's List.

Højgaard explicó que la situación se está agravando por los brotes secundarios de coronavirus que están obligando a endurecer las políticas, especialmente en los principales centros de relevo de Hong Kong, Singapur y Malasia. "Los marinos han sido muy responsables de no interrumpir el empleo del buque y la movilización de bienes, pero nos estamos acercando mucho, muy cerca de un lugar en el que creo que la tripulación se negará a firmar la próxima prórroga del contrato", dijo.

El también presidente de la Asociación de Armadores de Hong Kong se refirió a las caóticas medidas que se están adoptando para repatriar y sustituir a la tripulación. "Mientras las cosas se iban facilitando, aunque lentamente, creo que la gente de mar tenía la esperanza de que se irían a casa (…) Pero ahora que hemos llegado al punto en que ha sido al revés en un par de lugares, se está acercando mucho al punto en que la gente dice 'no, no puedo hacer esto', simplemente porque están al límite de su capacidad para hacer las cosas", sostuvo.

En ese sentido, la fragilidad de la salud mental de la gente de mar está en primer plano para los armadores y agentes, en medio de la creciente preocupación por la seguridad de los buques. Un capitán que acaba de regresar a su país de origen europeo denunció de forma anónima que "la situación en el mar es horrible (…) Siendo el capitán del buque, no se me permite mostrar mis sentimientos. Todo tengo que aceptarlo con una sonrisa. Mi tripulación empezó a volverse loca, quiero decir, simplemente psicótica. No es en absoluto una buena situación". Debido a la escasez de vuelos disponibles, solo un tercio de la tripulación de su nave pudo salir.

El Índice de Felicidad de la Misión para la Gente de Mar, publicado esta semana, reveló que se estaba acumulando frustración, preocupación y estrés, y advirtió de una creciente crisis de salud mental.

Adicionalmente, el número de tripulantes que se inscriben en la lista y dan positivo antes de embarcar está aumentando en todo el mundo, por lo que ha aumentado la preocupación de que los agentes de contratación no investiguen estrictamente a la tripulación antes de que se embarquen en un buque. "Algunos agentes y armadores de buques solo contratan tripulaciones con testeos negativos, pero como no es obligatorio en muchas regiones, los operadores más pequeños no están haciendo testeos", afirmó un agente con base en Nueva Delhi.