La Fiscalía de Brasil denunció a dos ejecutivos ligados a Maersk, por corrupción, en un caso relacionado con la operación Lava Jato, según fuentes oficiales, informó EFE.

El Ministerio Público presentó cargos ante la Justicia contra Wanderley Saraiva, representante contratado por Maersk, y Viggo Andersen, directivo en Brasil de la compañía, por su supuesta participación en la trama de corrupción descubierta al interior de la estatal Petrobras.

También fue denunciado Eduardo Autrán, antiguo gerente de Logística de Petrobras, por corrupción pasiva y desvío de recursos públicos, según informó la Fiscalía en un comunicado.

Los tres ejecutivos son investigados por irregularidades en contratos de fletamento firmados entre Maersk y Petrobras y que, según las autoridades, generaron un daño económico a la empresa estatal brasileña estimado en US$31,7 millones.

De acuerdo con la querella presentada en los juzgados de Curitiba, donde se concentran las investigaciones de la Lava Jato, entre 2006 y 2014, Andersen, representante de Maersk en Brasil, pactó con la empresa el pago de comisiones ilegales que alcanzaban el 2,5 % del valor de los contratos firmados con Petrobras.

La mitad de ese monto era transferido a una empresa creada por Saraiva, que hacía las veces de intermediario en la negociación de los contratos y quien, a su vez, daba una parte de ese dinero al exdirector de Abastecimiento de Petrobras Paulo Roberto Costa. Este último confesó tales prácticas en un acuerdo de colaboración con las autoridades brasileñas y su testimonio ha servido como base para la denuncia presentada ahora por el Ministerio Público.

A cambio de esos sobornos, Costa entregaba los ejecutivos navieros informaciones privilegiadas sobre las demandas que tenía Petrobras con relación al fletamento de buques de gran tamaño, además de influir para favorecer la contratación de la firma que representaban.

Según la Fiscalía, este pacto dio como resultado "el pago efectivo de al menos 4,03 millones de reales (unos US$720.000)" por concepto de sobornos hacia Costa.

Lava Jato investiga desde 2014 un vasto entramado corrupto que desvió millonarios recursos de la petrolera y por el que han ido a prisión decenas de importantes empresarios y políticos, entre ellos el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, condenado dos veces por corrupción, aunque ahora se encuentra en libertad.