Una investigación realizada por la Alianza Rebelde Investiga (ARI) reveló que, pese a las sanciones y con un tercio de la flota paralizada, 46 buques atracaron en Venezuela para cargar o descargar petróleo y derivados a Cuba y otros países, además de realizar despachos a diversos puertos del país entre noviembre de 2019 y enero de 2020. De todo el número de buques, apenas tres son propiedad de Petróleos de Venezuela S.A (PDVSA).

La paralización de la compañía petrolera estatal se ha gestado tras el hundimiento de la embarcación "Río Canagua", propiedad de (PDVSA) luego de colisionar con roqueríos en diciembre pasado. Además, el buque "Negra Matea" lleva tres años varado en un astillero portugués y permanecerá allí mientras se paga por su reparación. Otros tres tanqueros activos le fueron retirados de PDVSA por China debido a insolvencias.

La investigación también reveló que seis buques de carga permanecen anclados en Venezuela por diversas causas, dejando a PDVSA con una baja de su flota propios que, en la década pasada, fletaba alrededor de 60 tanqueros para sus operaciones anuales. Se identificaron 112 buques de terceros que entre 2015 y 2018 fueron administrados por PDV Marina, según informes de auditoría interna a los que se tuvo acceso y otros registros internos de la empresa. 

Según el Plan Siembra Petrolera 2006-2013, se esperaba que durante ese período PDVSA aumentara de 21 a 42 su propiedad de buques petroleros propios para pasar de transportar 600.000 barriles de petróleo al día a 1.200.000. De acuerdo a los últimos balances, en agosto de 2020, seis años luego de culminada la primera etapa del Plan, la empresa estatal exporta 300.000 barriles diarios, pero no cuenta con los 58 buques proyectados en el plan.