Varias semanas antes de que se detectara el primer caso de covid-19 en Chile, Terminal Pacífico Sur Valparaíso, TPS, concesionario del Terminal 1 del puerto de Valparaíso, ya trabajaba en coordinación con otros estamentos para prepararse para la emergencia.

A un año de iniciada la pandemia, Andrés Repetto, gerente de Operaciones de TPS, destaca que "mantuvimos nuestra cultura de salud y seguridad como prioridad, lo que permitió asegurar la continuidad operacional sin parar ningún turno. Tuvimos un mínimo impacto en productividad, mejoramos nuestra relación e interacción con nuestros clientes y con los demás stakeholders de la cadena logística, porque trabajamos muy coordinadamente con ellos, además de continuar con nuestros compromisos medioambientales".

Laura Chiuminatto, subgerente de HSE, rememora que "comenzamos trabajando con otras instituciones en enero de 2020, antes de que se registrara el primer caso, lo que nos permitió estar preparados y movilizarnos de manera ágil a medida que la situación fue evolucionando, adaptando nuestras instalaciones, formas de trabajar y protocolos a todas las recomendaciones nacionales e internacionales para prevenir el contagio y proteger la salud de las personas y sus familias".

Por otra parte, desde la etapa inicial de la pandemia había plena conciencia de que se debía mantener el compromiso con las operaciones para asegurar el abastecimiento de la población, por lo que se tomaron medidas muy tempranamente con ese objetivo sin descuidar la seguridad y salud de los colaboradores, algo que se ha conseguido plenamente.

"Cuando hablamos de la pandemia, lo más importante es el foco de la empresa en las personas, eso es lo principal. Nosotros como empresa tenemos que garantizar un ambiente de trabajo seguro para todos quienes debemos trabajar presencialmente en el terminal, porque la naturaleza del trabajo de muchos de nosotros es presencial. Todo lo que hacemos se enfoca en que toda la gente que viene al terminal tenga seguridad en su trabajo, y lo hemos cumplido. El terminal es un lugar donde se cumplen todas las medidas recomendadas para evitar los contagios, porque somos conscientes del valor del trabajo", destaca Repetto.

Diálogo e interacción con clientes

Para el ejecutivo, otra clave en este tiempo desafiante ha sido la interacción y coordinación con los clientes, en un contexto donde la incertidumbre es permanente y se deben hacer ajustes constantes, habilitando también canales digitales que han facilitado la conexión y el trabajo. "Culturalmente, somos una empresa que está muy cerca del cliente, que tiene la disponibilidad para sentarse a conversar, responder siempre el teléfono, atender sus necesidades y explicar las cosas de forma transparente para alinear las expectativas de ambos", enfatiza.

Coordinación con todas las áreas 

Para abordar la tarea, desde el comienzo se creó un comité integrado por personas de distintas áreas y liderado por Oliver Weinreich, gerente general, con el objeto de coordinar el esfuerzo de todas las gerencias y departamentos del terminal desplegados para evitar la propagación del Covid-19 entre los colaboradores y las personas que prestan servicios en su recinto.

Con la prioridad de cuidar la salud de las personas, TPS impulsó un sistema de teletrabajo para los colaboradores que, de acuerdo con sus funciones, pueden realizar sus labores en forma remota, modalidad que alcanza a casi 100 personas. Además, con el objeto de reducir la cantidad de personas en las oficinas, se implementó un sistema de rotación en turnos para las áreas que deben realizar su función de manera presencial, manteniendo el nivel de compromiso y eficiencia.

Sumado a lo anterior, se avanzó con otras implementaciones que ayudan a prevenir el contagio dentro de TPS, como lavamanos portátiles distribuidos por todo el terminal y un sistema de higienización con luz UV para cabinas de grúas, fabricados internamente por el equipo de Ingeniería como un aporte clave para la prevención.

Otras medidas aplicadas más estándar y aún vigentes son las cámaras térmicas para el control de acceso de todas las personas, sanitización de oficinas, equipos y superficies, dispensadores para sanitización en distintos puntos y kit personal para limpieza de superficies y espacio de trabajo, señalización de distancia social en distintos puntos, uso de mascarilla obligatoria, horarios diferenciados para evitar la proximidad con muchos trabajadores al mismo tiempo, separadores de filas, mamparas de vidrio, asientos bloqueados en los buses y comedores y desarrollo de procedimientos electrónicos para la realización de muchos trámites. Asimismo, se habilitó un sistema de buses de acercamiento para los colaboradores que necesitaron traslados dentro de la región durante el horario de toque de queda.

Rodrigo Cabrera, subgerente de Personas, concluye que "la continuidad operacional ha estado garantizada gracias al compromiso total de nuestros colaboradores, lo que incluye empresas contratistas, que se han sumado a las medidas de cuidado muy rigurosas y un muy positivo clima de colaboración con los integrantes de la cadena logística. La pandemia nos ha dado importantes lecciones, sobre todo que tenemos que trabajar unidos para superar cualquier desafío, cada uno desde su rol. Nos sentimos orgullosos de haber mantenido la continuidad de nuestro trabajo sin parar ni un día, siempre con la salud y seguridad de nuestros colaboradores como objetivo principal, y valoramos especialmente el diálogo con nuestros dirigentes sindicales y trabajadores, que nos ha permitido estar muy alineados en torno a las medidas que hemos tomado".