La Guardia Costera de Estados Unidos, el jueves 7 de octubre, abordó el portacontenedor "Róterdam Express" operado por Hapag Lloyd, como parte de la investigación sobre las causas de la ruptura de un oleoducto que causó un derrame de crudo frente a las costas de California el fin de semana pasado.

Según datos recopilados por un servicio de navegación marítima, el portacontenedor habría realizado una serie de movimientos inusuales cuando estaba anclado en el punto más cercano a un oleoducto del sur de California, que reventó, provocando un derrame de crudo en las playas. En ese sentido, la Guardia Costera está investigando si el ancla del buque podría haber enganchado y doblado el ducto propiedad de Amplify Energy, una empresa basada en Houston que gestiona tres plataformas en alta mar al sur de Los Ángeles.

Los datos de MarineTraffic, muestran que el "Rotterdam Express", de 305 metros de eslora, tenía asignado el fondeadero SF-3, el más cercano a la zona donde se rompió el oleoducto, frente a Huntington Beach.

A modo de respuesta, Hapag-Lloyd en un comunicado confirmó que los investigadores de la Guardia Costera abordaron el buque mientras estaba anclado en el puerto de Oakland y la empresa asegura no tener nada que ver con el derrame. "Estamos cooperando completamente con las autoridades en este momento", dijo Nils Haupt, un vocero de Hapag-Lloyd desde Hamburgo, Alemania.

Agregó que el portacontenedor no se movió de donde estaba anclado ni pasó por encima de la tubería durante el periodo en cuestión y que estuvo anclado frente a Long Beach hasta que se dirigió a un atracadero el 3 de octubre. El vocero informó que el buque salió del sur de California dos días después y llegó a Oakland el 6 de octubre.

En tanto, un funcionario estadounidense, que no quiso revelar su identidad, dijo que el "Rotterdam Express" se había convertido en objeto de la investigación del derrame, pero advirtió que el buque era tan sólo una de las pistas seguidas en el caso, que está en su fase preliminar. Las autoridades intentaban reunir datos de ubicación y navegación de la nave que pueda ayudarles a identificar sus movimientos exactos.

Por su parte, John Amos, presidente de Skytruth, una organización sin fines de lucro que utiliza tecnología satelital para rastrear problemas ambientales, informó que su firma ha estado analizando datos de los movimientos de buques el viernes 1 de octubre por la noche en el área del oleoducto cuando se detectó por primera vez el derrame. Skytruth examinó los datos de ubicación del “Rotterdam Express” durante varios días cuando estaba anclado en el área y descubrió que era el buque más cercano al oleoducto.

Pero Skytruth también descubrió que el “Rotterdam Express” nunca estuvo a menos de 1.500 pies de la línea, según datos satelitales. En cambio, el buque mantuvo un patrón semicircular que se esperaría de una nave anclado movido por el viento y la corriente. Esa distancia, detalló Amos, hace que sea poco probable que su ancla sea la culpable.

Cabe mencionar que el "Rotterdam Express" era uno de los ocho buques portacontenedores y dos petroleros que estaban anclados en la zona en ese momento, según los datos del Marine Exchange of Southern California.

El derrame

El director general de Amplify, Martyn Willsher, dijo que los buzos habían determinado que un tramo de 4.000 pies (1.219 metros) del oleoducto se había desplazado 32 metros (105 pies), con la forma de la cuerda de un arco. El petróleo escapó por una delgada grieta.

No estaba claro cuánto se había filtrado. Amplify ha dicho en sus comunicados públicos que no se derramaron más de 476.962 litros (126.000 galones), aunque dijo a investigadores federales que podrían haber sido sólo 111.291 litros (29.400 galones).

Finalmente, según datos de MarineTraffic, el buque salió de Long Beach el lunes en dirección al puerto de Oakland, donde permanecía atracado en el muelle el miércoles por la noche.