Los puertos alternativos causan dolores de cabeza a los importadores que tratan de evitar el atasco en los puertos del sur de California debido a la escasez de camiones, ferrocarriles y centros de almacenamiento. Es el caso que enfrentó Flexport, cuando una línea naviera planeaba trasladar la carga desde el Puerto de Los Ángeles al pequeño Puerto Hueneme, a unas 80 millas de la costa de California. Sin embargo, las empresas de transporte por carretera no estaban dispuestas a apoyar el cambio de destino, reporta Wall Street Journal.

Jason Parker, jefe de transporte de la empresa sostuvo que "hablamos con transportistas [terrestres] de todo el mercado de Los Ángeles y Oakland y la sensación era que no podrían soportar el volumen si se movía a través de Port Hueneme". Finalmente, la compañía prefirió mantener el destino de sus importaciones. "El retraso de dos semanas en Los Ángeles, frente a la ruta de Hueneme, iba a causar menos dolores de cabeza a los clientes", dijo Parker.

De este modo las líneas navieras que buscan evitar los cuellos de botella en los puertos de California se encuentran con la interrogante de cómo pueden hacer llegar los bienes a tiendas y almacenes desde puertos alejados de sus líneas de suministro establecidas y que tienen modestas conexiones de transporte.

Los puertos pequeños de EE.UU. han atraído las miradas de propietarios de la carga y de líneas navieras. Sin embrago, la mayoría no tiene suficientes trabajadores en los muelles para descargar la carga o un suministro constante de camioneros o espacio de almacén para manejar el diferencial de volúmenes de carga, dijo Anthony Hatch, analista director de ABH Consulting.

Los esfuerzos han derivado la carga a otros puertos de la Costa Oeste de EE.UU. (USWC), como Seattle y Oakland, y a destinos aún más alejados como el puerto de Portland (Oregón), que tras perder un servicio regular de contenedores en 2016, ha recuperado algunas operaciones. El puerto de Hueneme, conocido sobre todo como puerta de importación de plátanos de Del Monte, espera que su primer portacontenedores fletado llegue en noviembre.

En la Costa Este de EE.UU. (USEC) puertos como Baltimore y  Tampa Bay (Florida), también se jactan de operar sin atascos en un esfuerzo por atraer a las líneas de contenedores y a sus clientes. No obstante, su capacidad palidece frente a las operaciones de Los Ángeles y Long Beach (LA-LB)), complejo que movilizó algo más de 6 millones de contenedores de importación en los primeros siete meses del año, casi el 40% de todas las importaciones de contenedores que desembarcaron en los puertos estadounidenses durante ese tiempo, según Beacon Economics.

El alto perfil de los puertos como puerta de entrada de las importaciones ha crecido a medida que el retail se han apresurado a reponer los inventarios que se agotaron a principios de la pandemia, impulsando la movilización alrededor de 1,1 millones de contenedores más a través de Los Ángeles y Long Beach (LA-LB) durante los primeros siete meses de este año que manejaron durante el mismo período en 2019. Sin embargo, navegar a puertos alternativos puede añadir semanas al tiempo que se tarda en llevar los bienes desde Asia a EE.UU., y puede acumular nuevos costos y complicaciones.

Rachel Rowell, de C.H. Robinson Worldwide, dijo que para cambiar el flujo de bienes a puertos alternativos se necesita disponibilidad de contenedores, espacio en los buques, capacidad de los camiones y equipamiento, incluido el chasis que se acopla a los camiones para permitirles transportar contenedores, dificultades por las que "el desplazamiento de puertos no suele ser una opción preferida", afirma.

Seko Logistics ha fletado buques a Portland (Oregón) y Jacksonville (Florida) para importadores frustrados. Por ello, la empresa ha debido alquilar contenedores, espacio adicional en Portland y ha gastado semanas transportistas terrestres locales capaces de trasladar la carga a centros de distribución en Ohio y California, haciendo que los costos de envío alcances los US$20.000 por contenedor, no muy lejos de las elevadas tarifas de transporte de contenedores spot.

En la USEC, ITS Logistics ha trasladado a camioneros de Jacksonville (Florida) a Charleston (Carolina del Sur) para atender a los expedidores que quieren evitar el congestionado puerto de Savannah (Georgia). "Para los conductores y para nosotros es una carga", dijo Paul Brashier, vicepresidente de transporte e intermodal de ITS Logistic. "Cuando reposicionas a la gente a cientos de kilómetros de distancia y están acostumbrados a ir y venir localmente y están en casa todas las noches, es un desafío".