El valor de las importaciones y exportaciones mundiales de bienes alcanzó los US$5,6 billones en el tercer trimestre de 2021, estableciendo un récord trimestral, según un informe de la UNCTAD publicado el 30 de noviembre. Además, las nuevas proyecciones de la edición de noviembre de Global Trade Update de la organización muestran que el comercio de bienes y servicios alcanzará los US$28 billones en el año, lo que supone un aumento del 23% con respecto a 2020 y del 11% en comparación con los niveles anteriores al Covid-19.

Pero los buenos resultados del comercio en general ocultan que la recuperación ha sido desigual entre países y sectores, según el informe. "La tendencia positiva del comercio internacional en 2021 es en gran medida el resultado de la fuerte recuperación de la demanda debido a la disminución de las restricciones por la pandemia, los paquetes de estímulo económico y el aumento de los precios de los commodities", dice. También advierte que las previsiones para 2022 siguen siendo muy inciertas.

Resultados históricos pero desiguales

Aunque el sector de los servicios repuntó en línea con el crecimiento general, el comercio de servicios, como el turismo, seguirá estando ligeramente por debajo de los niveles anteriores a la pandemia, con US$6 billones en 2021.

Entre los sectores manufactureros, el comercio de productos relacionados con la energía fue el que más creció, impulsado por la elevada demanda y el aumento del precio de los combustibles fósiles. Mientras tanto, el comercio fue más apagado durante el tercer trimestre de 2021 en algunos sectores afectados por la escasez mundial de semiconductores, como la industria del automóvil y la electrónica.

Desde una perspectiva regional, el crecimiento del comercio también siguió siendo desigual en el tercer trimestre de 2021, aunque las diferencias regionales fueron menos pronunciadas que en el primer semestre del año.

Según el informe, los flujos comerciales siguieron aumentando con más fuerza para los países en desarrollo en comparación con las economías desarrolladas, destacando que esta tendencia se había generalizado. "Si bien esta tendencia fue impulsada por el fuerte crecimiento del comercio en las economías en desarrollo de Asia oriental en los trimestres anteriores, se ha vuelto más amplia en todos los países en desarrollo en el tercer trimestre de 2021", dice el informe. "Además, en el tercer trimestre de 2021 el crecimiento del comercio ha sido relativamente menor para las economías de Asia Oriental que para otros países en desarrollo".

El informe señala que, por ejemplo, el crecimiento del comercio de la India se ha acelerado en el tercer trimestre tanto en bienes como en servicios, mientras que el de China se ha mantenido relativamente constante, "aunque en niveles ya elevados".

Incertidumbre en el futuro

Entre los factores que contribuyen a la incertidumbre sobre el próximo año, el informe cita el crecimiento de China "por debajo de las expectativas" en el tercer trimestre de 2021. "Unas tasas de crecimiento económico inferiores a las previstas se reflejan generalmente en unas tendencias comerciales mundiales más bajas", señala, al tiempo que apunta a "presiones inflacionistas" que también pueden afectar negativamente a las economías nacionales y a los flujos comerciales internacionales.

El informe Perspectivas del Comercio Mundial de la UNCTAD también señala que "muchas economías, incluidas las de la Unión Europea", siguen enfrentándose a perturbaciones relacionadas con el COVID-19 que podrían afectar a la demanda de los consumidores el próximo año.

Además, el informe advierte que las grandes e impredecibles oscilaciones de la demanda que marcaron el año 2021 y provocaron una mayor tensión en las cadenas de suministro y una espiral de costos de transporte podrían continuar el próximo año. "En particular", dice, "los retrasos en los principales centros de la cadena de suministro que han caracterizado la mayor parte de 2021 podrían continuar en 2022 y, por lo tanto, afectar negativamente al comercio y remodelar los flujos comerciales en todo el mundo".

También, los factores geopolíticos podrían influir en el cambio de los patrones comerciales, ya que el comercio regional dentro de África y en la zona de Asia-Pacífico aumenta, "desviando el comercio de otras rutas".

Finalmente, el informe también destaca el riesgo de que continúe la escasez de semiconductores. "Desde el inicio de la pandemia del COVID-19, la industria de los semiconductores se enfrenta a vientos en contra debido a los aumentos imprevistos de la demanda y a las persistentes limitaciones de la oferta... Si persiste, esta escasez podría seguir afectando negativamente a la producción y al comercio en muchos sectores manufactureros".