El Intendente de la región de La Araucanía, Luis Mayol, ha impulsado con fuerza la idea de construir un puerto cerca de Nigue (Toltén), un proyecto que no solo está en estudio, sino que también se ha conversado con autoridades en Argentina. El potencial de esta zona del sur de Chile -para hacer un puerto más industrial- se relacionaría directamente con la carga que se despacha de Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, de manera que ésta no tenga que dar la vuelta por el Canal de Panamá ni por el Estrecho de Magallanes.

En MundoMarítimo consultamos a académicos especialistas en logística e industria marítimo-portuaria sobre la factibilidad de concretar el proyecto que podría traer más desarrollo a la Araucanía, una región donde priman las actividades forestal y agrícola, en la que el desempleo casi alcanza el 7%.

El académico de la Escuela de Ingeniería Civil Oceánica de la Universidad de Valparaíso, Felipe Caselli, cree que antes que todo es fundamental contar con estudios de oferta y demanda, que permitan respaldar una decisión como esta. “Todo proyecto portuario es de carácter estratégico e implica grandes inversiones, lo que hace necesario que esta decisión tome en consideración el funcionamiento del sistema de forma integrada, no mirar esta zona como una unidad territorial aislada sino como parte de la red logística nacional”, explica.

En ese contexto, Caselli afirma que es posible que un terminal portuario no sólo sea viable sino que, además, del gran beneficio para el desarrollo de la región de la Araucanía, hace hincapié en la necesidad de una evaluación que incorpore las distintas alternativas de conexión, como por ejemplo, la ferroviaria. “Sin duda que la región tiene una ventaja respecto de la conectividad vial con Argentina, pero es necesario contar con estudios detallados que aseguren la eficiente utilización de recursos en inversiones de este tipo”, puntualiza.

Sin embargo, el director de la carrera de Ingeniería en Transporte Marítimo de la Universidad Andrés Bello (UNAB), Caupolicán Guerra, estima que hasta el momento no se hace necesario un nuevo terminal portuario. “Creo que cada terminal debería potenciar y modernizar su infraestructura conforme a las exigencias del mercado y nuevas tecnologías”, argumenta.

Y es que, según el profesor de la UNAB, la región del Biobío posee varios terminales marítimos:  Lirquén, Talcahuano, San Vicente, Lota, Coronel, Cabo Froward, Muelle Penco, terminales de gráneles líquidos, Muelle Cap, entre otros, lo que convierte a la región en un gran nodo en la cadena del comercio exterior y transporte marítimo, generando con ello mucha competitividad en los diferentes tipos de carga que se transfieren en los respectivos terminales.

En tanto, el docente de Logística de Duoc UC sede Plaza Oeste, Renzo Ulloa, afirma que un puerto en la zona de la Araucanía es completamente factible. “Por un lado, hay una deuda importante con el desarrollo económico de la región, la cual es -en cifras de desempleo- una de las zonas más afectadas. Adicionalmente, la implicancia de la construcción de un puerto, requiere en términos de infraestructura, un plan estratégico sobre el hinterland y foreland, todo esto para que la interconexión entre puerto, accesos, bodegas, industrias y ciudad sea la mejor para una alta productividad y eficiencia”, explica.