El Senado de Brasil aprobó el 25 de noviembre el proyecto de ley que establece el Programa de Estímulo al Transporte por Cabotaje (BR do Mar). El proyecto cuya aprobación este año es considerada prioritaria por el Gobierno Federal, volverá a la Cámara de Diputados, donde se originó. De autoría del Ejecutivo, la propuesta fue informada por el senador Nelsinho Trad (PSD-MS), quien mantuvo el dictamen aprobado en septiembre en la Comisión de Asuntos Económicos (CAE) del Senado.

El proyecto pretende fomentar la competencia en la prestación del servicio, ampliar la flota para la navegación de cabotaje, estimular el desarrollo de la industria naval del sector, incentivar la formación de la gente de mar nacional y las inversiones derivadas de las operaciones de cabotaje en las instalaciones portuarias, y optimizar el uso de los recursos procedentes de la recaudación del Flete Adicional para la Renovación de la Marina Mercante (AFRMM).

El texto prevé la creación de la Empresa Brasileña de Inversiones Navieras (EBN-i), que deberá constituir una flota y fletar buques para que las empresas navieras brasileñas (EBN) operen, eliminando la necesidad de que inviertan en su propia flota. Además, el programa modifica la asignación de recursos del Fondo de la Marina Mercante (FMM) - financiado, sobre todo, por la recaudación de la AFRMM - ampliando las hipótesis de uso por parte del sector, con la inclusión, por ejemplo, del mantenimiento preventivo de los buques.

Otra iniciativa incluida en el proyecto es la ampliación del plazo del Régimen Fiscal de Modernización y Ampliación de la Estructura Portuaria (Reporto) hasta el 31 de diciembre de 2023. Según el ponente, la ausencia de este incentivo, vigente entre 2004 y 2020, ha supuesto enormes pérdidas para la logística y la industria del país, que según plantea se encuentra en un momento crucial de inversión por parte de los sectores portuario y ferroviario.

Otros puntos destacados del proyecto de ley son la prórroga de la exención de las AFRMM hasta 2027, lo que permitiría a la industria salinera de Río Grande do Norte hacer frente a la competencia de la sal proveniente de Chile; la reprogramación de las financiaciones realizadas con recursos del FMM y concluidas antes de la pandemia, siempre que no superen los plazos máximos de 72 meses de carencia y hasta 24 años de amortización; la garantía de más puestos de trabajo, con la exigencia de que las embarcaciones extranjeras de cabotaje tengan al menos un tercio de tripulantes brasileños al inicio de sus operaciones en el país. 

El texto también establece que los buques extranjeros tendrán derecho a disfrutar de las mismas condiciones comerciales para la prestación de servicios de apoyo portuario, y no más servicios de practicaje (servicio de asesoramiento a los capitanes de los buques para la navegación en aguas restringidas).

En su informe, Nelsinho Trad recomendó la tramitación autónoma del proyecto de ley del Senado (PLS) 422/2014, de la senadora Kátia Abreu (PP-TO), que se adjuntó al PL 4.199/2020, el cual propone la modernización del control del tráfico marítimo en el ámbito portuario mediante la modificación de una serie de disposiciones que interfieren en los servicios de practicaje.

Discusión del proyecto

Durante el debate, el senador Paulo Rocha reconoció los puntos positivos de la propuesta, pero evaluó que la iniciativa perjudica a la industria naval brasileña. “Permite a los buques extranjeros con tripulación extranjera; permite el uso de recursos destinados a la construcción de buques en el país para el mantenimiento de buques extranjeros; no limita la cantidad de buques extranjeros en funcionamiento “, criticó Paulo Rocha.

El senador Carlos Viana (PSD-MG), por su parte, dijo que el proyecto moderniza la navegación y favorece el desempeño de los camioneros al ampliar la posibilidad de utilizar los camiones en tramos menores y en nuevas regiones de Brasil.

Por su parte, el senador Fernando Bezerra destacó que Nelsinho Trad hizo un trabajo minucioso después de discutir el proyecto con el gobierno, la industria naviera y los transportistas logísticos. “Su informe consiguió dar cabida a todas las aportaciones y merece el reconocimiento de la CNI [Confederación Nacional de la Industria], de la CNT [Confederación Nacional del Transporte] y de todos aquellos que están interesados en que el cabotaje sea un importante modo de transporte en el país”, dijo.

El senador Eduardo Braga (MDB-AM) también acogió con satisfacción el informe de Nelsinho Trad, que, según Braga, favoreció la búsqueda de consenso. También señaló que el transporte de cabotaje favorece a decenas de astilleros de la región amazónica.