La política 'Cero COVID' y el estricto control fronterizo siguen teniendo graves consecuencias para las tripulaciones y los buques que recalan en los puertos del China, especialmente si los miembros de la tripulación han dado positivo en el COVID-19, lo que se ha transformado un desafío y un costo para los operadores de buques, reporta Gard.   

En este escenario, no es infrecuente que se produzcan congestiones y retrasos en los puertos debido a la escasez de personal esencial en tierra, como los pilotos, el personal de las terminales y los inspectores. Por otra parte, en la desafortunada situación de que uno o más miembros de la tripulación a bordo de un buque hayan dado positivo en la prueba de COVID-19, la obtención de la asistencia médica adecuada ha resultado a menudo difícil, y los retrasos y los costos asociados en los que se ha incurrido como resultado han sido considerables.

En algunos puertos chinos, a los buques con casos confirmados o sospechosos de COVID-19 a bordo se les ha negado incluso la entrada para operaciones de carga o reparaciones en astilleros.

Como nota positiva, el Consejo de Estado de China ha publicado recientemente una notificación en la que anuncia la puesta en marcha de un conjunto de mecanismos conjuntos de prevención y control de la COVID-19 aplicables en todas las regiones chinas. El objetivo es mantener la cadena de suministro del transporte marítimo y los derechos de los miembros de la tripulación.

Ante esta situación Gard recomienda encarecidamente que los capitanes, con suficiente antelación al arribo a cualquier puerto chino, busquen orientación de las autoridades portuarias locales y de los agentes de los buques sobre cualquier restricción y otras medidas preventivas vigentes.

Igualmente recomienda a los operadores de buques que sigan de cerca la evolución del brote y las zonas afectadas por el COVID-19 en cada momento, además de seguir promoviendo la vacunación y el cumplimiento de las medidas sanitarias probadas, como el uso de mascarillas, el distanciamiento físico y la higiene de las manos. También deben revisar sus planes de gestión de los cambios de tripulación y aplicar todas las recomendaciones pertinentes establecidas en los protocolos revisados apoyados por la OMI.

En caso de tripulantes con COVID-19 en puertos chinos, Gard entre otros aspectos enfatiza que se debe:

• Mantener pruebas de apoyo sobre cómo se han ejecutado e implementado a bordo los planes de prevención de COVID-19 del buque. Es importante que los buques con tripulación infectada sigan las directrices disponibles de la OMI y de la industria sobre COVID-19, así como los requisitos locales en los puertos chinos, para mejorar la concienciación de la tripulación y evitar la propagación del virus.
• Verificar, antes de organizar le arribo de un buque en un puerto chino, las políticas locales relativas al tratamiento de los casos positivos de COVID-19 a bordo. Tan pronto como se confirme la presencia de uno o más casos positivos de COVID-19 a bordo, es fundamental ponerse en contacto con el agente local del buque, para conocer los últimos requisitos de prevención y control de epidemias.
• Nombrar a un corresponsal/abogado local en una fase temprana. Además de obtener la información y las estimaciones recomendadas anteriormente, también es útil designar a un abogado local para obtener una mejor evaluación de la situación en los puertos chinos y examinar la razonabilidad de los gastos incurridos.
• Solicitar que cualquier dinero que se pague sea un anticipo que estará sujeto a la futura aprobación, tras la revisión de los documentos justificativos. Se debe considerar como antecedente que algunos de los miembros de Gard han experimentado tasas excesivas relacionadas con: tarifas de terminal, tarifas de desinfección y gastos relacionados con la cuarentena.
• Buscar ayuda de otros funcionarios. Dependiendo de las circunstancias específicas, los capitanes pueden a veces encontrar útil llamar a la línea telefónica de servicio público de 24 horas gestionada por el gobierno para pedir ayuda.

Cobertura de P&I asociada al COVID-19

Durante la pandemia, se han observado reclamaciones que son algo diferentes y más complejas que las habituales.

En relación con los casos de tripulación positiva a la COVID-19 en China, algunos miembros de Gard  han informado que las autoridades chinas no emiten informes médicos que documenten los resultados positivos de las pruebas de la COVID-19, sino que comunican los resultados de las pruebas a través de WeChat o por teléfono. Entonces para porder documentar los resultados positivos de las pruebas, se recomienda tomar capturas de pantalla de los resultados de las pruebas recibidas a través de WeChat, y si se reciben por teléfono, que se mantenga un registro oficial de ello. Además, debería solicitarse a las autoridades chinas los resultados de las pruebas por escrito.

También sugiere como pertinente considerar negociar e incluir una cláusula COVID-19 en los contratos de fletamento.