En los últimos 30 años, unas 50 embarcaciones, la mayoría de ellas pesqueras, han sido abandonadas y se han acumulado en la bahía de Montevideo, ocasionando un impacto ambiental, contaminación visual, e incluso obstaculizando la navegación, informó El País.

En 2019, la Administración Nacional de Puertos (ANP) adjudicó a Movilex la licitación pública creada con el fin de limpiar la zona denominada "cementerio de barcos", por la suma de US$150.000 por cada nave a retirar.

Posteriormente, la empresa cedió a la firma Fewell, integrante del Grupo Christophersen, el contrato para el desguace de 22 buques hundidos, explicó el director de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Juan Curbelo (Partido Nacional), quien detalló que "Movilex ya desguazó cuatro buques. Ahora está arrancando Fewell. Estamos comenzando a resolver un problema endémico del puerto de Montevideo que tiene entre 20 o 30 años".

Los buques hundidos en la bahía de Montevideo serán reflotados por Fewell y remolcados hacia el puerto de Puntas de Sayago perteneciente a la ANP. Allí, la empresa Fewell instaló una grúa que tiene 120 toneladas de fuerza, la que el lunes 1 y el miércoles 3 de enero, arrastró dos naves para su desguace.

En este momento, en el puerto de Montevideo hay medio centenar de buques abandonados. "De esa cantidad de buques dejados por sus dueños, 40 ya son propiedad del Estado. Hay otras 12 o 15 embarcaciones que aún pertenecen a privados", expresó Curbelo.

Añadió que "en esta primera etapa, Fewell deberá reflotar y trasladar hacia el puerto de Puntas de Sayago otras 16 embarcaciones. A un promedio de 400 toneladas por buque, se extraerá unas 1.600 toneladas de acero del puerto. En una segunda etapa serán desguazados otras 20 naves".