Muchos entes y organizaciones vinculadas con el shipping esperan con impaciencia la aprobación del proyecto de ley sobre documentos comerciales electrónicos, que podría allanar el camino para la adopción generalizada de letras de cambio, pagarés, conocimientos de embarque (B/L) y recibos de centros de almacenamiento digitales tanto en el Reino Unido como en la Commonwealth.

Lo anterior podría significar que, a partir de 2023, traders y exportadoresdel Reino Unido y de la antigua Commonwealth podrían empezar a cambiar a formas electrónicas de generar y mantener registros. ¿Podría el blockchain ser la clave para un cambio indoloro y seguro hacia un mundo comercial digital?, interroga Trade Finance Global.

En cuanto se ratifique el acuerdo, se pondrá en marcha una revolución para un sector que ha estado dominado por el papel y plagado de fraudes.

Un estudio realizado por el Stimson Center revela que la tecnología de contabilidad distribuida (DLT, por su sigla en inglés), entre ellas el blockchain (conjunto de tecnologías que permiten llevar un registro seguro, descentralizado, sincronizado y distribuido de las operaciones digitales, sin necesidad de la intermediación de terceros), puede utilizarse para facilitar la aplicación del control de las exportaciones en forma digital sin comprometer la integridad o la seguridad de los datos.

Mejora de la seguridad y reducción del fraude

En el ámbito del control de las exportaciones y las aduanas, la tecnología blockchain puede ayudar a evitar la proliferación de documentos falsificados y diversos certificados relacionados con las aduanas. Una de sus principales ventajas es que protege los datos de la piratería, el robo o el fraude, que actualmente son grandes problemas en la industria de la exportación e importación.

Blockchain emplea funciones como el sellado de tiempo y los hashtags (que asignan a cada transacción una huella digital única) para garantizar la integridad y la procedencia de los datos. Además, su sistema de almacenamiento descentralizado significa que los piratas informáticos no tienen un único punto de entrada, ni pueden acceder a depósitos enteros de datos si consiguen "colarse".

Esta combinación hace que los sistemas de “libro mayor” del blockchain sean altamente resistentes a la manipulación. Esto no sólo ayuda a corroborar la autenticidad de los documentos digitales, como los certificados de uso final de las exportaciones, sino que también garantiza que las licencias y permisos de exportación e importación emitidos por las autoridades no sean falsificados.

Aumentar la trazabilidad de materiales o sustancias sensibles durante el envío

Cuando se trata de ayudar a las autoridades aduaneras, las aplicaciones de blockchain también pueden ayudar a aumentar la trazabilidad de las sustancias controladas y peligrosas, como el material nuclear, los suministros médicos y los productos químicos de doble uso, durante el envío y el transporte.

Reforzar los controles de exportación en torno a este tipo de cargas sensibles se ha convertido en una obligación internacional en virtud de la Resolución 1540 del Consejo de Seguridad de la ONU.

En este caso, las capas adicionales de seguridad, posibles gracias a la creación de "claves" de seguridad e identidades digitales, significan que las tecnologías de cadena de bloques tienen el potencial de detectar mejor el desvío, descubrir las violaciones de datos y limitar el acceso no autorizado, aumentando la confianza entre las diversas partes en los ámbitos de seguridad de alto nivel como las aduanas.

La brecha entre la política y la aplicación

Muchos gobiernos ya han empezado a desarrollar sus propios sistemas en respuesta a la pandemia del COVID-19. Países como Bahrein y Singapur, por ejemplo, han optado por adoptar sistemas de comercio digital basados en los convenios elaborados por la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional, también conocida como CNUDMI.

Sin embargo, la mayor preocupación para muchos es que cada país acabe desarrollando su propio sistema y que éste no acabe siendo compatible.

Reducir los tiempos de tramitación y autentificación

Uno de los retos a los que se enfrentan las autoridades aduaneras y de exportación, así como las instituciones de financiación del comercio y las compañías de seguros, es verificar la autenticidad de la documentación normalmente asociada a las solicitudes de control de las importaciones y las exportaciones de forma eficiente.  En la actualidad, el sistema está cargado de papel y no permite una distribución rápida a todas las partes necesarias para tramitar las solicitudes de seguro, las propuestas de financiación o la verificación de las transacciones comerciales transfronterizas.

Muchos piensan que la digitalización del sistema acelerará el ritmo de procesamiento seguro de las transacciones, lo que, a su vez, tiene el potencial de desbloquear otros US$1,2 billones de exportaciones.