Muchos cargamentos de graneles agrícolas deben ser fumigados a bordo de los buques para evitar la infestación. Sin embargo, para lograr la eficacia, la operación de fumigación iniciada en el puerto de carga a menudo debe continuar en tránsito hacia el puerto de descarga. Esta "fumigación en tránsito" puede poner en peligro la seguridad y la vida de los miembros de la tripulación y del personal de tierra si no se maneja adecuadamente. La toxicidad del fumigante hace que sea extremadamente importante concienciar sobre los peligros de la fumigación en tránsito, señala un reporte de Gard.  

La fumigación en tránsito comienza en el puerto de carga con la aplicación del fumigante en las bodegas de carga cargadas por un experto "fumigador a cargo", seguido del sellado hermético de las escotillas. El proceso se continúa intencionadamente en el espacio sellado durante el viaje. Según las Recomendaciones de la OMI sobre el uso seguro de plaguicidas en los buques aplicables a la fumigación de las bodegas de carga, la fumigación en tránsito queda a discreción del capitán. Sin embargo, el proceso es común para los productos agrícolas. Esto se refleja en la cláusula del BIMCO de 2015 que ofrece a los fletadores por tiempo o por viaje la opción de fumigar la carga en tránsito a su costo y riesgo siempre que la fumigación sea conforme a las Directrices de Seguridad de la OMI.

El fosfuro de hidrógeno (fosfina) es el fumigante utilizado en tránsito. El gas fosfina es tóxico y, en concentración, mortal para los seres humanos. La inhalación de este fumigante puede causar problemas respiratorios, náuseas y, en última instancia, asfixia. Trágicamente, tripulantes han perdido la vida debido a fugas en los espacios de alojamiento o al entrar en un espacio cerrado donde el gas está activo. Además de sus propiedades tóxicas, el gas fosfina puede inflamarse espontáneamente en el aire en concentraciones superiores a su LFL (Límite Inferior de Inflamabilidad) del 1,8%. Puede producirse una explosión a altas concentraciones y puede causar graves daños en las bodegas y en las tapas de las escotillas, así como daños personales a la tripulación y a los trabajadores en tierra.

Medidas de seguridad para la fumigación en tránsito

• Las Normativas de Seguridad de la OMI especifican que al menos dos miembros de la tripulación (incluido un oficial), después de recibir formación, deben ser designados como representantes capacitados del capitán responsables de garantizar que se mantengan las condiciones de seguridad en el alojamiento y los espacios de trabajo en tránsito.
• Inspección previa a la fumigación: Como parte del proceso para determinar si la fumigación en tránsito puede llevarse a cabo con seguridad, el representante capacitado del capitán y el fumigador a cargo designado por el cargador/fletador deben realizar una inspección minuciosa del buque antes de la fumigación, mientras las bodegas están vacías.

El fumigador encargado debe presentar la documentación que acredite su competencia y la de su equipo, así como la carta de nombramiento del cargador/fletador. Además, debe proporcionar al capitán una declaración escrita que certifique el resultado de la inspección previa a la fumigación, así como el procedimiento de fumigación previsto, incluyendo comentarios específicos sobre el tipo y la cantidad de fumigante que se utilizará en cada bodega, los riesgos que conlleva y las precauciones de seguridad que se tomarán.

Previo al proceso de fumigación se deben considerar los siguientes aspectos:

• El capitán debe asegurarse de que los oficiales y la tripulación pertinentes se han familiarizado con la etiqueta del fumigante, los métodos de detección y los procedimientos de seguridad y emergencia.
• Debe haber a bordo un equipo de protección respiratoria y un equipo de detección de gases adecuados, y la tripulación debe estar bien formada en el uso del equipo específico.
• La fumigación no debe comenzar hasta que hayan finalizado todas las operaciones de carga y todo el personal no autorizado haya abandonado las zonas inseguras del buque.
• Todos los miembros de la tripulación a bordo deben ser conscientes de los espacios que están siendo o han sido fumigados, y por lo tanto se consideran inseguros. Esto puede incluir los espacios adyacentes que no han sido tratados. Todas las entradas a las zonas inseguras deben estar provistas de advertencias adecuadas de "gas venenoso", debidamente firmadas y fechadas por los fumigadores.
• Durante el viaje, las concentraciones de PH3 en los espacios habitados o de trabajo deben ser controladas a intervalos regulares, según las instrucciones del fumigador encargado, para detectar lo antes posible cualquier filtración inesperada de gas.
• El fumigador a cargo también debe dar instrucciones sobre cómo se debe dispersar el gas fumigante al final del período de exposición. Esto suele hacerse a través del sistema de ventilación de la bodega y/o abriendo las escotillas.
• El fumigador a cargo en el puerto de carga también debe dar instrucciones sobre cómo se deben eliminar los residuos/remanentes de fumigante de forma segura y adecuada, utilizando el equipo de seguridad apropiado.