Freeport LNG, compañía estadounidense de gas natural licuado (GNL), dijo que apuntaba a reiniciar a mediados de diciembre su planta de exportación de Texas, que ha estado cerrada durante seis meses después de un incendio, en espera de la aprobación regulatoria. La segunda instalación de exportación de GNL más grande de EE.UU., cerró en junio después de una explosión que, según los consultores de energía, fue el resultado de un error humano a causa de procedimientos inadecuados de operación y otros factores, reporta Reuters.

Las exportaciones de GNL de EE.UU. han aumentado constantemente durante años, y ese suministro se ha vuelto crucial para los compradores de Europa desde que Rusia cortó en su mayoría el suministro de gas natural al continente en respuesta a las sanciones impuestas a Moscú después de su invasión de Ucrania.

Freeport LNG dijo en un comunicado que espera convertir alrededor de 2 mil millones de pies cúbicos por día (bcfd) de gas en GNL en enero de 2023 y alcanzar la producción total utilizando ambos muelles en marzo de 2023. Sin embargo, su puesta en marcha no comenzará hasta que los planes sean aprobados por la Administración de Seguridad de Oleoductos y Materiales Peligrosos (PHMSA) del Departamento de Transporte de los EE.UU.

Freeport LNG había dicho repetidamente que la planta seguía en camino para volver a funcionar en noviembre.

EE.UU. actualmente está licuando alrededor de 12 bcfd de gas en GNL para exportar en las otras seis grandes plantas de exportación de GNL del país, según datos de Refinitiv.

Los reguladores federales de seguridad de oleoductos publicaron recientemente un informe de un consultor que culpó a los procedimientos operativos y de prueba inadecuados, al error humano y a la fatiga por la explosión del 8 de junio.

Freeport dijo que presentó las actividades de trabajo correctivas propuestas para un reinicio seguro de las operaciones iniciales a los reguladores para su aprobación.

Reinicio en diciembre

Muchos analistas dijeron en las últimas semanas que no esperaban que la planta se reiniciara hasta diciembre o más tarde porque la compañía aún no había presentado su plan de reinicio a los reguladores federales.

El cierre de Freeport ha obligado a los clientes a comprar GNL costoso de otras fuentes para abastecer a sus propios clientes. Además, en agosto, los precios de este combustible alcanzaron niveles récord de más de US$90 dólares por millón de unidades térmicas británicas (mmBtu) en la instalación de transferencia de títulos holandesa (TTF) en Europa y casi US$70 en el Japan Korea Marker (JKM) en Asia.

Eso se compara con un promedio de alrededor de US$7/mmBtu en lo que va del año en el punto de referencia de gas Henry Hub de EE. UU. en Luisiana.

Dado que Freeport no se reiniciará en noviembre, un par de buques de GNL que se dirigían a Freeport, como LNG Rosenrot, o que habían esperado fuera de la planta, como el “Prism Brilliance”, se trasladaron a otros puertos.