Las negociaciones laborales en los puertos de la Costa Este y la Costa del Golfo de EE. UU. comienzan en circunstancias muy diferentes a las negociaciones de la Costa Oeste que sacudieron las cadenas de suministro en los dos últimos años. La Asociación Internacional de Estibadores (ILA) quiere aprovechar las importantes mejoras salariales conseguidas por otros sindicatos del transporte. El sindicato ya amenaza con convocar una huelga contra las líneas navieras y empresas portuarias si no se llega a un acuerdo sobre un nuevo convenio plurianual antes de que expire el actual el 30 de septiembre, informa WSJ.

Harold Daggett, presidente del ILA, dijo a los estibadores en una protesta convocada en enero que el próximo contrato sería el mejor que el sindicato había tenido nunca. "Recuerden que cuando nosotros cerramos, todo el puto mundo se cierra",  advirtió Daggett. 

El responsable del sindicato que representa a más de 45.000 trabajadores de los puertos de Maine a Texas ha pedido a las secciones locales que resuelvan los problemas laborales locales con los empleadores antes del 17 de mayo, de modo que pueda negociarse un acuerdo para toda la costa antes de que expire el actual convenio. Las negociaciones formales se programarían una vez alcanzados los acuerdos locales. 

Principales afectados en caso de huelga 

Cualquier huelga tendría efectos en plena temporada alta, cuando los minoristas y otros importadores se preparan para las ventas navideñas. Jeremy Nixon, director ejecutivo de ONE, declaró este mes en la conferencia marítima anual TPM24 de S&P Global, celebrada en Long Beach (California), que espera que los importadores de la Costa Este introduzcan los productos de la temporada navideña a principios de año o envíen más carga desde Asia a los buques con destino a los puertos de la Costa Oeste.

Nixon dijo que una huelga "afectaría a todos los puertos de la Costa Este y no se nos permitiría desviar buquesa la Costa Oeste porque entonces esos buques serían boicoteados".

Algunos importadores y expedidores creen improbable una huelga en toda la costa, especialmente a un mes de las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre. Dicen que es probable que la administración intervenga para evitar lo que sería un piquete económicamente perjudicial.  

Más poder tras la pandemia del Covid-19

Pero algunos responsables del sector marítimo desconfían de las negociaciones en un periodo en el que los trabajadores sindicalizados, han hecho gala de un nuevo poder tras la pandemia del Covid-19, consiguiendo grandes mejoras salariales.

La ILA ha conseguido una serie de victorias locales antes de las negociaciones. El año pasado, el sindicato ganó una batalla legal de varios años que eliminó un regulador del puerto de Nueva York y Nueva Jersey. Este año ha ganado un litigio que obligará al puerto de Charleston a emplear a más estibadores sindicalizados en una nueva terminal de contenedores. 

El sindicato y la patronal iniciaron conversaciones a finales de 2022 con el objetivo de alcanzar un acuerdo rápido. Pero las negociaciones se estancaron hace un año y quedaron en el limbo hasta que Daggett dijo que deberían reanudarse en febrero.

Sin embargo, algunos importadores estadounidenses afirman no estar preocupados por las negociaciones laborales de la Costa Este, ya que las de la costa oeste, que concluyeron el año pasado, no fueron tan perturbadoras como se temía en un principio. 

Por otro lado, funcionarios de la industria dijeron que el ILA persigue un aumento salarial mucho mayor. Esto podría ser más difícil de absorber para las líneas navieras , ya que sus finanzas han cambiado en el último año. Éstas ganaron decenas de miles de millones de dólares durante la pandemia, cuando se disparó la demanda de fletes y crecieron vertiginosamente  las tarifas. Pero los beneficios se desplomaron tras la caída en picado de los volúmenes de carga y las tarifas. 

Por MundoMaritimo