DNV concedió una Aprobación en Principio (AiP) al diseño de un de un buque 21.700 TEUs propulsado con combustible dual amoníaco, desarrollado por MSC junto a los astilleros Zhoushan Changhong International y CIMC ORIC. El hito marca un avance en la ruta hacia portacontenedores  de gran escala con emisiones cero, preparando el terreno para la próxima generación de naves de gran envergadura.

El proyecto integra motores de combustible dual de última generación y tanques C-type de gran capacidad para amoníaco, combinados con un casco optimizado que incorpora proa vertical, popa rediseñada, líneas hidrodinámicas eficientes, recubrimientos de baja resistencia y hélices de alto desempeño. De acuerdo con el consorcio, las simulaciones CFD y ensayos de modelo validan mejoras sustantivas en eficiencia energética y consumo de combustible.

Desde CIMC ORIC, su gerente general Yin Xunbin destacó que la validación de DNV confirma el potencial del concepto para ofrecer a líneas navieras un buque de gran capacidad, eficiente y alineado con los objetivos globales de descarbonización. La revisión contempló estándares internacionales y normas de DNV en materia de sistemas de combustible, manejo y mitigación de riesgos asociados al uso de amoníaco, además de la configuración propulsora y requisitos de seguridad.

Por su parte, Norbert Kray, vicepresidente senior de DNV y director regional marítimo para Greater China, subrayó que las soluciones de combustible dual amoníaco ya transitan desde el plano conceptual hacia órdenes concretas y primeras entregas. Añadió que el AiP demuestra que el diseño cumple con los criterios de seguridad y desempeño más avanzados, consolidando la confianza del sector en el amoníaco como combustible viable para buques de gran envergadura.

El diseño también busca maximizar la relación carga-capacidad mediante una configuración de doble isla y un rediseño de la cubierta de proa que habilita bahías adicionales para contenedores de 40 pies, manteniendo la compatibilidad portuaria y operativa. A medida que el proyecto avanza, el consorcio seguirá con estudios de ingeniería más detallados, análisis de seguridad y desarrollo del sistema de manejo de gas y abastecimiento de combustible.

La AiP constituye una evaluación independiente que certifica la viabilidad del concepto bajo un marco predefinido de requisitos, garantizando que no existan barreras técnicas significativas para su desarrollo y posterior construcción.